Existen alrededor de 50.000 especies descriptas, y se estima entre 100.000 y 500.000 especies que hasta hoy no han sido clasificadas.
La gran mayoría de los ácaros son diminutos o llegan a tener unos pocos milímetros; el ácaro de los folículos humanos mide 0,1 mm. (Mas pequeño que algunos protozoos) los ácaros del polvo doméstico miden entre 0,2 y 0,5 mm. ambos son microscópicos; por otro lado, los ácaros de terciopelo alcanzan a medir hasta 10 mm. de longitud.
Los ácaros están entre los animales terrestres mas antiguos; se encontraron fósiles de estos del Devónico Inferior, hace aproximadamente 400 millones de años.
Los ácaros son en su mayoría depredadores, pero también fitófagos, detritívoros y parásitos; las garrapatas son hematófagas y son transmisoras de muchas enfermedades infecciosas.
Los ácaros son quelicerados pequeños, con larvas hexápodas (de seis patas).
Los ácaros tienen un hábitat muy diverso y se encuentran en casi todos los ambientes, tanto terrestres como en ríos y mares (hasta los 5.000 metros de profundidad), incluso se hayan en los polos y las altas montañas, los desiertos, el suelo hasta una profundidad de 10 metros, aguas termales con temperaturas que superan los 50º C. En un metro cuadrado de suelo en un bosque boreal de coníferas se encontraron más de 1 millón de ácaros pertenecientes a 200 especies distintas de al menos 50 familias.
Muchos ácaros se alimentan de plantas (musgos, helechos, hojas, flores, frutos, etc.), de líquenes y microorganismos, de otros artrópodos e incluso de otros ácaros. Muchos viven en los cultivos y son temibles plagas (como la araña roja) o útiles agentes biocontroladores de esas plagas (como los fitoseidos).
Los mamíferos y las aves son hospedadores de muchas especies de ácaros, y también muchos reptiles y algunos anfibios. Los insectos que construyen nidos o viven en hábitats semipermanentes como madera en descomposición o excrementos, son hospedadores de muchas especies comensales, parásitas o mutualistas.
La taxonomía de los ácaros es muy compleja y no esta definida todavía. Tradicionalmente los ácaros han sido considerados un orden de la clase arácnidos, pero en los estudios recientes, los ácaros se consideran una subclase, que puede dividirse en dos superórdenes que incluyen varios órdenes.
El excremento de los ácaros y los ácaros muertos son los factores desencadenantes más comunes de la alergia y de los síntomas del asma; se dispersan en un polvo fino que es inhalado por los habitantes de la casa. Los ácaros del polvo, que se encuentran en los entornos domésticos, se hallan en todos los ambientes de una casa. En las habitaciones los ácaros se alimentan de escamas de piel humana o animal. Una persona desprende un total aproximado de un gramo de piel al día. Los ácaros abundan en colchones, mantas, almohadas y sofás, ya que son dermatófogos. Se desenvuelven en condiciones ideales en lugares con temperaturas superiores a 20º C y humedades comprendidas entre el 70 y el 80 %.
Viven entre dos y tres meses, realizan una o dos puestas de huevos durante ese periodo, las cuales suelen contener entre 20 y 40 unidades. La primavera y el otoño son las estaciones mas propicias para su reproducción.
Los síntomas de la alergia a los ácaros del polvo son: congestión o goteo de la nariz con estornudos (especialmente en la mañana), picazón y lagrimeo de los ojos, tos, silbido al respirar y enrojecimiento de la piel.
Se calcula que entre el 10 y el 20 % de la población es sensible a los ácaros; son los responsables de la mayoría de los casos de alergias nasales y asma alérgica perenne. También tienen un papel importante en la dermatitis atópica.
Medidas preventivas para evitar los ácaros domésticos y las alergias:
- Aireación periódica de las habitaciones.
- Exposición de los colchones y ropa de cama al sol.
- Lavado frecuente a más de 60º C de la ropa de cama y las alfombras (si fuera posible evitarlas).
- Aspiración de todos los elementos de la habitación.
- Utilización de fundas anti-ácaros en colchones y almohadas.
- Evitar animales domésticos.
- Lavado frecuente de los muñecos de peluche.
- Mantener una atmósfera seca, entre 50 y 60 % de humedad y una temperatura de entre 18 y 20º C.
- Evitar las regiones con climas húmedos (cuanta más humedad, más ácaros).
- Mantenerse lejos de lugares de cultivos de ácaros como muebles llenos de algodón, plumas y pelos de animales.
- Si es alérgico/a no tener mascotas ya que estas son portadoras de ácaros.
Si tenés problemas de plagas, llamanos para que te asesoremos o bien para hacer las fumigaciones.